El Gobierno de Australia aplaudió la decisión de China de eliminar los aranceles del 80.5% que impuso en 2020 a las importaciones de cebada australiana, un paso más en el acercamiento entre ambos países para normalizar sus relaciones diplomáticas y comerciales.
China impuso en mayo de 2020 un arancel del 80.5% a la cebada australiana, medida que ha bloqueado efectivamente estas exportaciones al país asiático, en un mercado valorado en unos 601 millones de dólares en el año fiscal 2018-19.
La retirada de los aranceles entrará en vigor en agosto de 2023, según anunció el Ministerio de Comercio de China.
En respuesta al anuncio, después de que Pekín considerara "innecesario" mantener los aranceles, el Gobierno australiano anunció la suspensión definitiva de su apelación al respecto presentada ante la Organización Mundial del Comercio (OMC), según informaron hoy en un comunicado los ministros australianos de Exteriores, Penny Wong, y de Comercio, Don Farrell.
Los aranceles a la cebada se enmarcaban en una serie de restricciones que Pekín impuso en 2020 contra varios productos australianos, como el vino, el carbón, la langosta y la madera, entre otros.
Las medidas fueron impuestas por China después de que el Gobierno del entonces mandatario australiano Scott Morrison impulsara una investigación sobre el origen de la covid-19, aunque China, el principal socio comercial de Australia, niega que éste fuera el motivo.